El científico investigador y estudiante de doctorado a tiempo parcial de la Universidad de Groningen en los Países Bajos, Steven van der Wiek, ha desarrollado un nuevo método innovador para usar un dron agrícola para medir, monitorear y evaluar los niveles de radiactividad del suelo directamente desde el aire. Así lo informó el portal futurefarming.com.
Según un estudio sobre “Mapeo de elementos radioeléctricos de UAV: métodos de orientación y verificación para la inspección de campo geofísico”, el UAV está equipado con un sensor inteligente dedicado para medir la radiactividad en el suelo. Tal enfoque puede ser extremadamente útil para los agricultores, ya que la información obtenida no solo puede ayudar a evaluar el tipo de suelo, controlar el contenido de minerales y nutrientes en él e informar sobre el estado actual, sino también afectar a largo plazo el niveles de salud y fertilidad, en el aumento de los rendimientos de los cultivos en el futuro.
Los agricultores y productores pueden utilizar la información para optimizar sus procesos de fertilización o adaptar las estrategias de riego y recuperación. Hasta hace poco, tales mediciones solo podían realizarse desde el suelo utilizando detectores y analizadores grandes y pesados. Ahora existe un método de trabajo eficiente para realizar esta tarea desde el aire con la ayuda de UAV. La tecnología tiene otra ventaja indiscutible: el método es aplicable en áreas de campo que antes eran inaccesibles para el usuario desde el suelo.
Recuerde que casi todos los elementos químicos conocidos en la naturaleza, incluidos los radionucleidos, están presentes en los suelos. La radiactividad de los suelos se debe al contenido de radionucleidos en ellos. Hay radiactividad natural y artificial. Los suelos tienen el grado natural más alto de radiactividad entre los objetos biosféricos. La radiactividad natural de los suelos es causada por isótopos radiactivos naturales, que siempre están presentes en cantidades variables en los suelos y las rocas que los forman.
Los radionúclidos naturales se dividen en 3 grupos. El primer grupo incluye elementos radiactivos: elementos cuyos isótopos son radiactivos: uranio (238U, 235U), torio (232Th), radio (226Ra) y radón (222Rn, 220Rn). El segundo grupo incluye isótopos de elementos “ordinarios” con propiedades radiactivas: potasio (40K), rubidio (87Rb), calcio (48Ca), circonio (96Zr) y otros. El tercer grupo está formado por isótopos radiactivos formados en la atmósfera bajo la acción de los rayos cósmicos: tritio (3H), berilio (7Be, 10Be) y carbono (14C). El contenido bruto de isótopos radiactivos naturales depende principalmente de las rocas madre.
Los suelos formados sobre los productos de meteorización de rocas ácidas contienen más isótopos radiactivos que los formados sobre rocas básicas y ultrabásicas: los suelos pesados contienen más isótopos que los ligeros. Los elementos radiactivos naturales generalmente se distribuyen de manera relativamente uniforme sobre el perfil del suelo, pero en algunos casos se acumulan en horizontes iluviales y gley.