La Universidad e Investigación de Wageningen (WUR) y sus socios han desarrollado un nuevo tipo de combustible de aviación, producido a partir de corrientes de residuos de patatas.
La posibilidad de hacer un tipo de combustible de avión prometedor a partir de las corrientes de desechos de la producción de papa ya se ha probado a escala de laboratorio, explica WUR. El proyecto BioJet Fuel, ejecutado de 2017 a 2020 por un consorcio internacional liderado por Wageningen Food & Biobased Research, tuvo como objetivo definir las condiciones necesarias para escalar este proceso y lograr una cadena de producción viable de combustible para aviones de base biológica.
Corrientes de residuos de bajo valor
Las materias primas utilizadas como modelo en este proyecto son corrientes residuales del procesamiento de la papa. Estas corrientes se utilizaron como materia prima para la producción fermentativa de acetona, butanol y etanol (fermentación ABE). Si bien la composición de estos flujos de desechos los hace adecuados para la fermentación, actualmente se utilizan para aplicaciones de bajo valor. Las corrientes de desechos de papa, la materia prima en este proyecto, por ejemplo, se venden actualmente como alimento para ganado de bajo valor o se convierten mediante digestión anaeróbica en metano.
Investigación experimental
En el enfoque adoptado en este proyecto, la mezcla de ABE que se produce a partir del sustrato se convierte catalíticamente en hidrocarburos y, después de la hidrogenación y el fraccionamiento, en combustible de aviación. A través de la investigación experimental, se ha demostrado que la producción completa y las cadenas de valor para la conversión de corrientes de desechos agrícolas húmedos en combustible son técnicamente viables. También se ha realizado una evaluación tecnoeconómica y un análisis del ciclo de vida (ACV) de la cadena de valor. Además de las corrientes de desechos de papa utilizadas en este proyecto, un proceso comercial también requerirá materias primas adicionales para lograr un volumen suficiente. Las posibles materias primas que cumplen los criterios son la biomasa lignocelulósica y los flujos de residuos de la industria del papel.
Nuevas cadenas de valor
Los flujos de residuos producidos localmente del sector agrícola o alimentario se pueden utilizar como materias primas en la producción de biocombustibles avanzados si cumplen con estrictas condiciones de sostenibilidad. El proyecto BioJet Fuel está evaluando el valor completo y las cadenas de producción de biocombustibles a partir de corrientes de desechos orgánicos húmedos para el sector de la aviación (combustible de aviación sostenible o SAF). Los resultados de este proyecto podrían representar el primer paso en la creación de nuevas cadenas de valor en los Países Bajos, en las que la biomasa y los flujos de residuos con un alto contenido de humedad de la agricultura primaria y la industria alimentaria se utilizan como materias primas para bioprocesos de biocombustibles líquidos avanzados. , Afirma WUR.