Tradicionalmente, los productores de papa en Canadá utilizan el final del otoño para preparar sus lechos de papa para la primavera siguiente. El proceso establecido desde hace mucho tiempo tiene sus beneficios, pero también crea preocupaciones, incluida la pérdida de fertilidad del suelo, la disponibilidad de nutrientes para los cultivos y un aumento en las emisiones de gases de efecto invernadero.
Como informa Tina Karst en una noticia publicada por Agri-Vista, un nuevo proyecto de investigación en Lethbridge College en la provincia canadiense de Alberta trabajará para determinar qué pasos se pueden tomar para garantizar el mejor resultado para los productores, al mismo tiempo que se avanza hacia prácticas agrícolas ambientalmente sostenibles.
Rezvan Karimi, científico investigador del Mueller Irrigation Group, dirige el proyecto de $446,500 de tres años, que está financiado por Results Driven Agriculture Research (RDAR).
Las prácticas actuales de camas de otoño para los cultivos de papa involucran riego, aplicación de fertilizantes, arado y formación de camas, con el objetivo de proporcionar condiciones favorables de estructura del suelo en la primavera. El equipo de Karimi probará tres formaciones de camas diferentes: una cama de otoño tradicional, una cama de primavera después de tener un cultivo de cobertura de invierno y una cama de primavera sin cultivo de cobertura de invierno, para ver cómo cada una afecta el rendimiento, los niveles de nutrientes del suelo y las emisiones de óxido nitroso.
Es el primer proyecto conocido en Alberta que estudia el efecto de las camas de papa en la erosión del suelo y las emisiones.
Una fuente: https://www.potatonewstoday.com