Los agricultores de Bangladesh se enfrentan a un aumento significativo de los precios de las semillas, lo que pone en duda la viabilidad de sus cultivos de patatas. Dhiraj Roy, un agricultor de la aldea de Maljhar, en Dinajpur, se encuentra entre quienes están reconsiderando sus planes de cultivo debido al aumento de los precios de las semillas y otros insumos agrícolas.
En el mercado Railbazarhat, el mayor mercado mayorista de semillas de Dinajpur, el precio de las semillas de patata de la variedad Çhalisa ha subido hasta 1.10 dólares estadounidenses el kilo, un fuerte aumento respecto del rango de la temporada pasada, que oscilaba entre 0.66 y 0.77 dólares. A pesar de los esfuerzos por negociar, se espera que el aumento de los costes sume entre 110 y 132 dólares a los gastos de Dhiraj esta temporada.
En la división de Rangpur, que incluye Dinajpur, Thakurgaon y Panchagarh, los agricultores comenzaron a cultivar patatas en octubre. La temporada pasada, se cultivaron aproximadamente 1,650 hectáreas, lo que requirió alrededor de 3000 toneladas métricas de semillas. Los agricultores locales suministraron el 90 por ciento de estas semillas, y el resto fue proporcionado por la Corporación de Desarrollo Agrícola de Bangladesh (BADC) y empresas privadas. Sin embargo, como la BADC aún no ha comenzado a vender semillas, los precios del sector privado se han disparado y ahora oscilan entre 0.88 y 1.10 dólares por kilogramo.
Agricultores como Nur Alam, de la aldea de Ramdubi, han observado un aumento significativo de los precios de las semillas de patata Esterize, lo que ha dado lugar a peticiones de intervención regulatoria. Los productores de semillas y los comerciantes mayoristas atribuyen el aumento de los precios a los altos precios de la patata del año pasado y al aumento de los costes de almacenamiento en frío y de la mano de obra.
La BADC ha anunciado planes para distribuir 2,800 toneladas métricas de semillas en la zona metropolitana de Rangpur. Sin embargo, los agricultores siguen preocupados por el hecho de que, sin la intervención del gobierno, el aumento de los costos afectará gravemente su rentabilidad.
A medida que avanza la temporada de siembra, el aumento de los precios de las semillas plantea una grave amenaza para los medios de vida de los agricultores de la región, lo que pone de relieve la necesidad urgente de adoptar medidas para estabilizar los costos y apoyar la sostenibilidad agrícola.